Para la mujer que ha sentido que su voz se volvió un susurro…
Para la que cargó demasiado, dio demasiado, se exigió demasiado.
Para la que se mira al espejo y sabe que hay una parte de ella que quiere volver:
la parte instintiva, libre, sabia, indomable.

Es para ti si alguna vez te sentiste fragmentada, agotada o desconectada de tu fuerza.
Si intuyes que hay una versión tuya que está esperando ser desenterrada, llamada, honrada.
Si sabes que tu alma tiene hambre de verdad, de ritual, de símbolos, de profundidad.

Este camino es para la mujer que está lista para volver a su naturaleza salvaje
y dejar atrás el silencio, el miedo y la repetición de historias que ya no le pertenecen.